La reciente reducción del IVA del pan sin gluten del 10% al 4%, una de las reivindicaciones históricas del colectivo celíaco, no se está reflejando en el precio final en muchos establecimientos.
Según denuncia la asociación Celíacs de Catalunya, numerosos comercios y cadenas han aprovechado la normativa para mantener el precio de venta y quedarse con el beneficio de la rebaja fiscal.
La práctica ha sido detectada tanto en supermercados como en pequeñas tiendas, y ha llevado a la presentación de quejas ante la Agencia Catalana de Consum y la Agencia de Seguridad Alimentaria.
Desde la asociación señalan que esta situación perjudica a un colectivo que ya enfrenta altos costos debido a una dieta obligada por razones médicas.
Organizaciones como FACE recuerdan que la celiaquía no es una elección, sino una condición crónica que obliga a evitar el gluten de forma estricta.
El encarecimiento injustificado de estos productos esenciales vulnera derechos y genera indignación entre las personas celíacas.