En la era digital, el uso de pantallas se ha convertido en parte del día a día de niños y adolescentes.
Sin embargo, los expertos alertan de un aumento preocupante en trastornos asociados: cefaleas, déficit de atención, insomnio y problemas emocionales.
Según los pediatras, más del 90% de los niños entre 4 y 10 años sobrepasan los tiempos recomendados de exposición a móviles, tabletas y televisores.
Esta sobreexposición puede estar afectando el desarrollo cognitivo y social infantil.
Organizaciones como la Asociación Española de Pediatría piden una intervención clara: reducir el uso de dispositivos y fomentar competencias digitales saludables.
La solución pasa por el equilibrio y la educación digital desde edades tempranas.